Sobre mi


Estimad@s visitantes

Bienvenid@s a mi nueva web. Ya han pasado cuatro o cinco años desde que ofrecí la descarga del resultado de mi primera incursión en el terreno de la grabación. Lo llamé “Contar con música lo que no sé decir con palabras” y, aunque quedó lejos de ser perfecto y ahora cambiaría bastantes cosas, sí supuso un gran aprendizaje para mí y todavía hoy le guardo cariño. Tal vez algún día vuelva a grabar alguna de esas canciones poniendo en práctica todo lo que he ido aprendiendo desde entonces.

Ahora vuelvo con un disco diferente. Si la primera vez grabé una colección de canciones acústicas limitado por mi situación personal (no me voy a enrollar explicándola), las cuales nunca tuve la intención de llevar al directo; esta vez sí que he intentado plasmar el tipo de música que siempre he querido hacer desde que empecé a tocar, allá por los años 2002 o 2003.

Y para ponerlo en situación, lo primero que voy a hacer es explicar el título que he decidido ponerle a este nuevo disco, que es “EMPEZANDO DESDE (EL) BAJO”.

Es un título de doble sentido. El primero, más obvio, es que la mayoría de las canciones empiezan a componerse desde el bajo. El segundo hace referencia a la idea de “empezar desde el principio”(desde bajo), olvidar todo lo que he hecho en cuanto a la música en estos casi veinte años e intentar responder a preguntas como… ¿Qué quería realmente hacer cuando empecé a tocar? ¿Qué es aquello que desde el principio me queda por hacer y que no quiero que se quede como una espina clavada para siempre?

Pues bien. Esta nueva colección de canciones representa mi respuesta a todas estas preguntas. Cuando empecé a tocar, quería formar parte de un grupo en el que tocáramos canciones compuestas por nosotros, combinando estilos como el funk y el rock; música hecha con guitarras y bajos potentes pero, a la vez, con mucho “Groove”. Como digo yo, “Funk con mala leche o mala baba (bueno, en realidad uso otra palabra)”. Por diversas circunstancias nunca llegué a hacerlo y ahora, aprovechando que he encontrado la opción de hacerlo, quiero sacarme esa espina.

Sigue sin ser mi situación ideal. Igual que hace unos veinte años, esto quería hacerlo en grupo, pero ante la posibilidad de no poder hacerlo nunca, decidí cambiar la perspectiva: grabar yo las guitarras, los bajos y las voces (aunque no es el terreno en que mejor me desenvuelvo), confiar en encontrar a un batería que le dé a los temas el toque necesario y, si el resultado es satisfactorio, intentar llevarlo al directo acompañado de compis de batalla. Lo único que no contemplaba era quedarme con las ganas de hacerlo.


Y esta explicación me da paso al terreno de los agradecimientos (no incluyo los personales por no extenderme):
Quisiera agradecer a ADRIÁN BLANCO BRANDOLINI el enorme trabajo que ha hecho, componiendo y grabando baterías para quince canciones en un tiempo récord, acoplándose con una facilidad tremenda a todo lo que ya tenía yo grabado y con un resultado que supera mis expectativas más optimistas. En apenas dos semanas me solucionó un trabajo que yo pensaba que llevaría meses o que incluso sería imposible de hacer. Esto no hubiera sido posible sin él.


Por otro lado, agradecer a OCTAVIO HIDALGO ROLDÁN todo el trabajo que ha puesto en este disco, desde la grabación de la batería hasta la mezcla, arreglo y masterización de cada pista grabada en cada canción. Gracias a su mano, todo lo que hay grabado tiene un sonido mucho mejor del que tenía antes de “sacar las pistas” de mi ordenador. Tampoco lo hubiera podido hacer sin él.

Por último, agradeceros el hecho de haber llegado hasta aquí y deseo que podáis disfrutar el disco tanto como yo he disfrutado con su creación.

“Desde que me inyectó su veneno, la música me acompaña cada hora de cada día”